Es la tónica general hoy, lluvia, lluvia y más lluvia....
L@s que se hayan librado que aprovechen, por que el resto estamos condenados ( ¿Se nota mucho que "odio" que llueva?) bueno la palabra no es "odio", ya sé que va genial para el medio ambiente, que limpia la ciudad, bla, bla, bla... pero la cruda realidad es que hay poco que hacer en días como este, callejeramente hablando.
Dentro de las cuatro paredes de tu dulce hogar la cosa ya cambia, ahí se abre un mundo infinito de cosas para hacer, así de repente se me ocurre, sacar la ropa de invierno (las que todavia no lo hemos hecho), mirar y ordenar fotos, practicar makeups nuevos, sesión de belleza, cocinar... Vaya, resulta que no es tan malo que llueva no?
A mi me ha dado por la cocina, y aprovechando las inclemencias del tiempo y que este fin de semana se celebra la "castañada" (que no sé como se dirá en otras provincias pero seguro que así no) me he currado unos super "panellets" que para las que le suene a chino són los dulces típicos que se comen en Catalunya la vispera del dia 1 de Noviembre. Lo de super "panellets" es en sentido literal por que han salido del tamaño de una mandarina (la parte andaluza me sale de vez en cuando) y tengo que decir que he tenido la inestimable colaboraciòn de mi señora madre, para que no se me enfade, que mas bien ha sido al revés pero bueno.
Y para rematar unos pestiños "receta made in sevilla" para compensar un poco, que en casa somos mezcla "fifty fifty" y siempre intentamos mantener el perfecto equilibrio entre Norte y Sur.
Esta es la prueba gráfica con los dulces resultados.
